Los muchachos que entraron a las universidades el año pasado nacieron en 1988, para ellos ha existido solamente un Papa que ha durado toda la vida, bueno ahora dos.
Cuando Gabriel García Márquez ganó el Premio Nóbel, ni siquiera sabían leer; tenían seis años cuando la Unión Soviética se desintegró; son demasiado jóvenes para acordarse del trasbordador espacial Challenger; probablemente no saben que fue “el reto Pepsi”; para ellos el Sida ha existido toda la vida.
No alcanzaron a jugar con el Mesa Pon, el Pac Man o el Atari; el C. D. entró al mercado cuando no tenían ni un año de vida; nunca tuvieron un tocadiscos y algunos de ellos ni siquiera los conocen; tal vez nunca han visto una película del Santo o Blue Démon y si las han visto los efectos especiales les parecen patéticos.
Muchos de ellos no saben o no recuerdan que los televisores solo tenían cinco o seis canales y una “U” y que para cambiar de canal se hacía con una perilla, incluso algunos nunca han visto un televisor en blanco y negro y ni siquiera se imaginan lo que es ver la tele sin un control remoto.
Nacieron seis años después de que la Sony puso en el mercado el Walkman; para ellos los patines siempre han tenido las ruedas en línea y ni hablemos de la normalidad con que ven un teléfono celular o una computadora personal; puede que nunca hayan visto los programas de televisión “Plaza Sésamo”, “Viaje a las Estrellas”, “Perdidos en el espacio”, “El túnel del tiempo”, “Topo Gigio” o “El Llanero Solitario”, “Odisea Burbujas”, “Los Pitufos”, “El Auto Increíble”, “El Avispón Verde” y nunca haber sido sobrinos del "Tío Gamboin” .
Y como van a creer que Jhon Travolta pudo bailar con esa panzota; nunca usaron brillantina líquida o vaselina, ni oyeron hablar del “Hombre nuclear” y la “Mujer biónica”; nunca oyeron o pudieron decir “Por el poder de heiscol” o “Thunder, thunder, thunder... Cats”; no han escuchado decir “Sórdenes jeff”; ni saben quien es la Pequeña Lulú, Tobi o Trucutú.
Apenas recuerdan haber escuchado el “Pito” de la Fábrica Anderson Clayton, o nunca supieron de el; solo por comentarios saben que tuvimos varias Salas de Cine; conocieron solo por fotografías la Estación del Ferrocarril, y que desde aquí podíamos viajar en tren a Monterrey o a Torreón, ni saben que la Plaza es para ir a pasear y no para hacer comercio en fin.
Recuerda que toda esta gente entró a la Universidad el año pasado, ellos son los jóvenes de ahora...Síntoma de que nos estamos poniendo viejos.
